Un día llegamos a Furni, un día con
su noche; noche de luna nueva. Las barcas iban y venían; había
que estar atento para sortearlas. ¡Qué actividad!
su noche; noche de luna nueva. Las barcas iban y venían; había
que estar atento para sortearlas. ¡Qué actividad!
Hay islas que te llegan enseguida, las
ves y una chispa te recorre el intelecto. Esta es Furni. El porqué,
el cual, o de qué, habría que buscarlo en
el subconsciente de cada uno. El mío está en sus barcas. Creo a
pies juntillas, que en este país, en el que es difícil que el
salitre no empañe las ventanas , la vida no es igual si no hay una
barca. En Furni las hay a montones, y ¡Qué barcas!
ves y una chispa te recorre el intelecto. Esta es Furni. El porqué,
el cual, o de qué, habría que buscarlo en
el subconsciente de cada uno. El mío está en sus barcas. Creo a
pies juntillas, que en este país, en el que es difícil que el
salitre no empañe las ventanas , la vida no es igual si no hay una
barca. En Furni las hay a montones, y ¡Qué barcas!
Hay barcas de acuarela, barcas gemelas, barcas con
defensas de cabo trenzado, o con neumáticos pintados las más modestas, con delfines en su amuras, con aros
salvavidas a juego con sus regalas, con visillos puntilleros dibujando
anclas y peces entre sus nudos, con rezones de colores, con alfombras
elegantes; barcas mimadas por sus armadores hasta el dislate. Barcas griegas.
defensas de cabo trenzado, o con neumáticos pintados las más modestas, con delfines en su amuras, con aros
salvavidas a juego con sus regalas, con visillos puntilleros dibujando
anclas y peces entre sus nudos, con rezones de colores, con alfombras
elegantes; barcas mimadas por sus armadores hasta el dislate. Barcas griegas.
Es difícil encontrar un sitio en el
muelle, por no decir imposible, si quieres tener un respeto por las Señoras Barcas. Ninguna concesión al yate de recreo, por el que en
otras islas se esfuerzan para que amarre. Aquí, primero están las
barcas, barcos, barquitas, barcazas, barculas. Bailando una danza sin
compás cada vez que alguien sale o retorna,
en este tráfico intenso que se parece al del puerto de Hamburgo. Me
gusta Furni; sin remedio.
muelle, por no decir imposible, si quieres tener un respeto por las Señoras Barcas. Ninguna concesión al yate de recreo, por el que en
otras islas se esfuerzan para que amarre. Aquí, primero están las
barcas, barcos, barquitas, barcazas, barculas. Bailando una danza sin
compás cada vez que alguien sale o retorna,
en este tráfico intenso que se parece al del puerto de Hamburgo. Me
gusta Furni; sin remedio.
Este puerto contracorriente
se llama Φούρνοι Κορσεών. Los
hornos de los corsarios. Y de ahí le debe venir la sangre rebelde;
de los piratas. No es solo una isla, si no todo un archipiélago, con
Furni y Címena cómo importantes y habitadas, que dibujan el perfil
de un bogavante, y una decena de islotes que cierran las bahías, un
poco más si cabe. No existe viento peligroso para Furni, siempre hay
un abrigo donde refugiarse. Excelente como escondite.
se llama Φούρνοι Κορσεών. Los
hornos de los corsarios. Y de ahí le debe venir la sangre rebelde;
de los piratas. No es solo una isla, si no todo un archipiélago, con
Furni y Címena cómo importantes y habitadas, que dibujan el perfil
de un bogavante, y una decena de islotes que cierran las bahías, un
poco más si cabe. No existe viento peligroso para Furni, siempre hay
un abrigo donde refugiarse. Excelente como escondite.
No es difícil
imaginar a unos hermosos Jabeques; tan coloridos como las actuales
barcas; camuflarse entre sus cabos, repartirse sus botines y
descansar de sus rafias. Eran rápidos y maniobrables los Jabeques,
capaces de remontar el viento a vela; sus elegantes diseños
mejorados del Dromón bizantino; Grecia siempre inventando y los
demás copiando; ideales para las incursiones corsarias.
imaginar a unos hermosos Jabeques; tan coloridos como las actuales
barcas; camuflarse entre sus cabos, repartirse sus botines y
descansar de sus rafias. Eran rápidos y maniobrables los Jabeques,
capaces de remontar el viento a vela; sus elegantes diseños
mejorados del Dromón bizantino; Grecia siempre inventando y los
demás copiando; ideales para las incursiones corsarias.
– ¿Y por qué lo de
hornos?- Le pregunté al dueño de una taberna.
hornos?- Le pregunté al dueño de una taberna.
– Porque todas las
casa tenían hornos.- Me dijo muy convencido.- Me sonó poco creíble; me
parece más bien que lo de “horno de corsarios” debe tener algún
significado parecido a “nido de piratas”, no al hecho en sí de
tener hornos.
casa tenían hornos.- Me dijo muy convencido.- Me sonó poco creíble; me
parece más bien que lo de “horno de corsarios” debe tener algún
significado parecido a “nido de piratas”, no al hecho en sí de
tener hornos.
Pero… llegó el
calamar que habíamos pedido; el atrapado sin luz de luna, capturado
en las barcas coloridas, las barcas que vienen y van, las barcas que
bailan en el puerto. Dejamos de preguntar. El comisario Montalbano
hubiera considerado una vulgaridad irritante hablar mientras se comía
unos salmonetes. Por este calamar…habría sacado el revolver.
calamar que habíamos pedido; el atrapado sin luz de luna, capturado
en las barcas coloridas, las barcas que vienen y van, las barcas que
bailan en el puerto. Dejamos de preguntar. El comisario Montalbano
hubiera considerado una vulgaridad irritante hablar mientras se comía
unos salmonetes. Por este calamar…habría sacado el revolver.
Que bonito quedaría el Viriato entre tanta barca cuidada, no desentonaría… pero, una pregunta: ¿Ikaria, Lepsoi, Furni?¿Por este orden? Seguir vuestro periplo en la carta, me lleva a imaginar vuestra siguiente recalada y me sale un triángulo. ¿Pal norte o pal sur? Otra cosa, dile a Jesusin que cuando te haga fotos, te sitúe en el sol que casi no me sales.
Un besito como una casa a los dos desde el Viriato en Denia.
Cesitar, es que no me da tiempo a contar todos los días una historia, asin que hay un lapsus de tiempo ¿Do you understand baby?
Besos
Yes, pero la droga de tus narraciones se me colapsa en las venas…
Sagerao, que eres un sagerao.
Gracias por tus relatos Ana
¿Cómo que gracias? Las tuyas que me lees. Tenemos cosas que contarnos cuando nos veamos. Tengo los ojos repletos de belleza, así que podré soportar unos meses de la degradación del Cabanyal.
Mmmmmmmmmmmmm, lo que daría por ese calamar. Fantástico tu relato, bueno todos.Esté último me ha encantado.Aquí sudando. Mil besos
Doce mil para ti. Y los calamares del Egeo ¡ Ay dios! eso si que es irrepetible.
¡Cómo apuntas al sibarita Montalbano y no al proletario Jaritos, pícara! La pistola por los calamares no sé si la sacaría pero por los salmonetes igual sí, aunque no es muy pistolero ni bucanero. Qué chulo Fourni, La Maga sola en el puertín, tú sola debajo de la sabina, ¡dale que libras!
Salud y que siga el buen rumbo.
Es que al Jaritos solo le flipan las yemistá de su mujer y no se extasia como Montalbano. Un calamar del Egeo es una experiencia mística.
La Maga estaba fuera del puertin porque las barculas no dejaban un sitio libre. ¡A ver quien se mete con ellas!
¡Qué bien me ha sentado leer este relato sobre las barculas!! Qué guapas son!! y, qué decir de las chicas (foreground & background – si no me equivoco) de la foto?? Se me están afilando los dientes de envidia (sana, sana… je!je!).
Un besito
Pili
En el Backgroun había un chico. Se llama Sr Penelas ¿Te suena? A ver si se va a ofender.
Besitos
Yo me refería al back-back-ground, ( no es La Maga??) no a Mr Penelas, en el que no había reparado ( ahora se ofenderá máááásss??)nomaibradertaikitisiman…
Un besote
Pili